Campeche es uno de los estados más pintorescos
del hermoso sureste mexicano. Rodeado de mar y de esa brisa suave que viene
desde el horizonte, este lugar nos invita a una tranquila observación de sus
calles, de sus casonas antiguas de colores, de sus frondosos árboles que crecen
gracias al clima cálido y húmedo típico de la zona costera de esta parte del
mundo.
Para conocer más de este lugar es necesario pasar
por la cabecera de municipio y ciudad más importante que es la Ciudad del Carmen, donde
encontraremos muchas actividades y puntos de interés para los viajeros que
llegan por primera vez a estas tierras.
Entre los atractivos se encuentran, por ejemplo,
la visita a la Plaza
de las Artesanías que se encuentra en el Malecón, un lugar tradicional de
encuentro al aire libre de todos los ciudadanos, así como también el
espectáculo de luz y sonido que se lleva a cabo todos los días durante la noche
en el Puente El Zacatal.
Pero además de estas actividades existe una rica
vida cultural gracias a espacios pensados para este fin como por ejemplo los
museos en Ciudad del Carmen, que no solo se ocupan de mostrarnos colecciones de
objetos valiosos sino que además nos enseñan parte de la historia de este
pueblo, cumpliendo con el fin último de estos lugares que no es otro que el de
la divulgación del conocimiento.
Entre los museos en Ciudad del Carmen se destaca
el Museo Victoriano Nieves, ubicado en la Calle 22, en el mismísimo centro de la ciudad,
por lo que no habrá problemas en encontrarlo. En este museo podremos ver una
colección permanente de piezas que datan de la época prehispánica y que nos
acercan el legado de las culturas originarias del sureste. También hay una sala
dedicada exclusivamente a los piratas, personajes protagonistas de muchas leyendas e historias de esta parte de Mexico. Finalmente otra sala nos muestra
fotografías así como obras de escultura y pictóricas.
El edificio en sí mismo es también algo que se
debe conocer pues es una muy bella construcción que data de la época del
porfiriato en la que se construían casas con un modelo arquitectónico clásico
pero muy atractivo. El sitio donde se encuentra erigido era propiedad hace
mucho tiempo de un adinerado joyero francés, quien decidió donarlo. Fue Victoriano
Nieves quien pensó construir allí un hospital, que fue la primera función de
este hermoso edificio con arcos y columnas en los corredores.
Fue en el año 1998 que se empezó a utilizar este
edificio como museo, permitiendo a los pobladores poder reflexionar sobre su
propia historia y a los viajeros de todas partes poder conocerla de una manera
amena e interesante. Este sitio permite además que toda la familia disfrute
pues si los más pequeños no logran interesarse en las historias disponen de una
sala de juegos especiales para poder sacarle el jugo a la visita mientras los
más grandes aprecian las colecciones.
Cada museo nos habla de la ciudad que visitamos
desde algún aspecto, es muy importante entonces podes visitarlos cuando tenemos
la oportunidad pues nos ayudan a entender la identidad de esa comunidad y a
valorar más cada visita que realizamos a ese pueblo.
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