México se encuentra en la región sur de
Norteamérica; en la parte noroeste del país se encuentra una península
alargada; un brazo de tierra entre el Océano Pacifico y el Golfo de California
o Mar de Cortés. Esta es la península de la Baja California, que por su gran
extensión se encuentra dividida en dos estados.
Las características del turismo en La Paz, México se centran en las
bellezas naturales de este destino turístico favorito tanto para turistas
nacionales como extranjeros. La Paz cuenta con muchos atractivos tanto
naturales entre los que destacan su flora, fauna endémica y sus atardeceres
únicos, como históricos y culturales, y por supuesto sus servicios turísticos,
actividades acuáticas, gastronomía envidiable y Fiestas tradicionales como el
Carnaval.
La Paz es
un maravilloso lugar con un clima
privilegiado, con alrededor de 350 días
de sol al año en promedio, le ofrece al viajero la oportunidad de maravillarse
disfrutando del Mar de Cortez, el cual
fue acertadamente llamado “El Acuario del Mundo” por el gran explorador de
mares y científico francés Jacques Ives
Cousteau, al descubrir en este mar la
mayor variedad de especies marina, que en cualquier otro mar.
Lugar de bellos contrastes entre desierto,
cielo y mar, ideal para disfrutar de placenteras vacaciones en las que
descubrirá cuán apropiado resulta el nombre de La Paz, ciudad que incluso fue
recientemente nombrada como uno de los mejores lugares de retiro en el mundo. Actualmente
La Paz, siendo una población costera, ofrece al turismo una gran cantidad de
atractivos relacionados con el mar, lo que le ha valido su fama a nivel
internacional gracias a la pesca deportiva, el buceo, la práctica del snorkel,
entre tantas otras actividades que se practican en sus hermosas playas (las más
importantes son El Coromuel, El Caimancito, Pichilingue y El Tecolote).
Sin
embargo, en La Paz también existen otras
playas que, a diferencia de las anteriores, preservan una condición solitaria
que confiere a los bañistas la sensación de permanecer totalmente ajenos al
mundo cotidiano, como son Balandra y El Coyote, absorbiendo los sentidos del
visitante en un marco de singular belleza.
En las proximidades
de La Paz abundan muchos atractivos más, los cuales se destacan ya sea por lo
extraordinario de su fauna marina, o bien por la paradisiaca soledad de su
entorno, elementos imprescindibles para quienes gozan del ecoturismo y el
contacto con la magia de la naturaleza. Las islas de La Paz son reconocidas a
escala nacional e internacional como ecosistemas de gran valor biológico,
social y económico.
Gracias a su belleza y riqueza natural, estas islas y sus
áreas marinas adyacentes han ido conquistando a un número creciente de
visitantes que buscan en ellas la oportunidad de ver y aprender sobre las
numerosas especies animales y vegetales que habitan en sus suelos y mares, sobre
sus procesos y los habitantes que las conforman. Las islas del Espíritu Santo y
Cerralvo son ejemplo de ello, aunque también abundan en las próximas
comunidades que ofrecen sus servicios al turista en playas como Las Cruces,
Buenavista y Los Barriles.
La Paz contiene una
notable riqueza histórica que nos transporta a un pasado muy especial fácil de
percibir al recorrer el malecón Álvaro Obregón, observar las viejas casonas que
datan del siglo XIX o al internarse en el centro de la ciudad; de gran valor
cultural es la visita al Museo de Antropología e Historia del Estado, que
cuenta con una colección de pinturas rupestres, así como con diversas salas de
exhibición donde se puede conocer la cultura de los pueblos californianos que
habitaron la región desde tiempos prehistóricos. Frente al Jardín Velazco, se
encuentra la catedral de Nuestra Señora
de La Paz construida en el siglo XIX.
La cocina paceña
es muy variada y rica en ingredientes provenientes del mar y notable por el
sazón de sus guisos, acompañados de una refrescante damiana, bebida típica
elaborada a partir de la planta silvestre del mismo nombre, cuyas propiedades
saludables son tan celebradas como populares.
Otros paseo particular es disfrutar de un
paseo de compras, ya que encontrará excelentes precios ya que La Paz, por ser
un puerto libre, se distingue como uno de los puntos comerciales más atractivos que puedan
existir, ofreciendo una gama enorme de artículos nacionales o extranjeros de
toda clase.
La Paz y sus
alrededores le permitirán renovar sus sentidos, y hasta ¨fantasear¨con los
lobos marinos juguetones o bucear con tiburones martillo y manta con rayas
gigantes; porqué no amigarse con delfines y ballenas en la espectacular y bella
isla de Espíritu Santo. Descubra pinturas rupestres milenarias escondidas en
cuevas de montañas distantes.
O simplemente relájese y no haga nada en nuestras
interminables playas de blanca arena. Vuelva a tener un encuentro con usted
mismo. Todo está aquí, esperando por usted en La Paz.
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