El turista siempre que elige un nuevo destino por
conocer, se pone a pensar qué es lo que busca de ese lugar. Diversión,
historia, cultura, lugares preparados para alojamiento, y espacios de
entretenimiento, tanto de día como de noche.
En México, en el estado de Coahuila, se establece una
ciudad, que incluso es la capital del estado: Saltillo.
Allí el visitante se encuentra con una localidad cuyo
crecimiento, económico, industrial y cultural es lo que más sobresalen en una
primera impresión. Pero al ingresar en ella, uno se da cuenta que es mucho más
que un centro industrial.
Saltillo ofrece al turista, alojamiento de primer
nivel, de distintos precios y con muchas opciones que se adaptan a las
exigencias de sus huéspedes. Lo que también brinda, son bellezas naturales para
visitar, entre las que uno se encuentra con la extensión del desierto y sus
dunas, las grandes montañas de la sierra, cerros y hasta volcanes. A los que se
suma la zona boscosa que rodea Saltillo. En todos estos espacios, se pueden
llevar adelante actividades características del turismo aventura, que van desde
caminatas hasta paseos en 4x4, pasando por cabalgatas y ciclismo de montaña.
Ya en la ciudad, uno ingresa en un importante mundo
cultural e histórico, el cual se ve expresado en la arquitectura de sus
edificios, algunos de los cuales datan de muchos años atrás y cuya forma
arquitectónica es colonial, barroca, griega o romana, según del edificio que se
hable. Lo cultural se ve demostrado en la cantidad de museos que realizan
muestras basados en distintas temáticas (el desierto, aves, historia), los
centros culturales y teatros que se ubican a lo largo de toda la ciudad.
Entre las calles de Saltillo, cada una de las cuales
tienen características únicas y fue construida por una razón o para conmemorar
a alguien. Una de ellas es la Plaza Nueva Tlaxcala en Saltillo. Su nombre se
debe a que fue construida y levantada frente al territorio que ocupaba el
pueblo de San Esteban de la Nueva Tlaxcala. La plaza se ubica incluso en el
sitio que marca la división en dos secciones de la población antigua, hacia el
este habitaban los españoles, mientras que yendo al oeste es donde los
indígenas tlaxcaltecas se ubicaban. El monumento principal que se erige en la
plaza, es uno que simboliza a la colonización de Coahuila.
En Saltillo, hay otras plazas que, sumados a los
edificios históricos, y a los que caracterizan el desarrollo sufrido en la
modernidad en la ciudad, conforman el paisaje único que la ciudad ofrece al
turista que se acerca. El cual se ve completo por las sierras que se funcionan
como enormes muros que cubren la ciudad con su sombra.
Así es como Saltillo se convierte en uno de los
centros vacacionales que son completos, de los que se hablaba al principio; cualquier
viajante lo elegiría como destino a conocer, ya que en la ciudad se ve cultura,
historria, naturaleza y entretenimiento, solamente es cuestión de aprovecharlos
y vivir la experiencia.
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